El paso del tiempo es algo que nadie puede combatir ni evitar. Pero a veces, es este paso del tiempo lo que hace que las emociones se intensifiquen, se refuerce la sabiduría y se agigante el libro de recuerdos y de historias para contar. Por esto, es muy importante prestar la atención y el valor que todos los abuelos merecen. Y es que el amor que un abuelo ofrece es un amor desinteresado, un amor incondicional, un amor que ha estado desde el primer momento en que supieron de nuestra existencia y que lo único que ha hecho es crecer cada día más.
El abuelo es esa persona que siempre va a estar allí, a disposición, aunque no se lo vea. Es quien siempre va a estar para ayudarnos, atento a nuestros problemas y buscando formas de resolverlos, aunque no se lo pidamos. Es quien nos conoce, sabe de nuestras fortalezas y de nuestras debilidades y, aunque pueda tener las propias, las deja de lado cuando de cuidarnos y hacernos sonreír se trata. Es el abuelo, aquella persona llena de ternura, de amor, de quien no faltan los abrazos que nos envuelven como abrigadas mantas en una noche de invierno. No hay par de brazos que pueda llegar a imitar la calidez de los de nuestros abuelos, cuya fuerza física puede ser menor con el paso del tiempo, pero no lo es el fuego que hay en su corazón.
Regalos para quien nos lo regala todo
Todo lo que nuestros abuelos hagan o den por nosotros es desde un lugar de amor, sin condiciones y, especialmente, sin pedir nada a cambio. Sin embargo, cuando se ha sabido apreciar el cariño de los abuelos, se empieza a buscar también poder hacer algo por ellos, poder devolverles al menos una pequeña pieza de todo lo que nos han dado a lo largo de nuestra vida y que lo han hecho desde el simple impulso que les otorgaron sus corazones.
Es por esto que, quienes aman a sus abuelos y buscan poder darles algo, se comen la cabeza cada vez que tienen que pensar en un regalo para ellos. Pero no porque consideren que no conocen lo suficiente a sus abuelos, sino más bien porque quieren darles lo mejor, algo significativo, algo que realmente pueda llegar al corazón. Pero hay algo que tenemos que tener en cuenta: cualquier cosa que le demos, si sale desde nuestro corazón, va a ser recibido por ellos como un acto de amor. Porque todo abuelo valora lo que sus nietos puedan darles, por el simple hecho de venir de ellos.
Entonces, si lo que querés es hacer un buen regalo a tu abuelo, no pienses en qué es lo mejor de lo mejor, pensá en qué es lo mejor, de tu parte, para él.
Compartiendo momentos… y mates
El mejor regalo que todo abuelo puede llegar a recibir por parte de sus nietos es, siempre, la posibilidad de pasar tiempo con ellos. Por eso, elegir objetos que favorezcan estos encuentros, estos momentos compartidos y charlas emotivas, es una de las mejores ideas que podemos tener. ¡Y claro! ¿qué puede ser mejor para compartir que el mate?
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El mate es esa bebida que une, que acerca, que se comparte y nos invita a disfrutar sin intermediarios. Es esa bebida que todos aman y que simboliza el compartir, el encuentro, la ocasión, la cercanía, la confianza. Nada puede haber mejor en este mundo que la oportunidad de compartir unos mates y unas buenas charlas, historias y anécdotas con tu abuelo, con esa persona que te ha visto nacer y ha estado a tu lado desde el primer día, con esa persona en cuya memoria radican las más fascinantes historias que se han acumulado con el paso del tiempo y de los sucesos. Nada puede haber mejor que estar cerca. Por eso, si lo que querés es estar cerca de tu abuelo, un buen mate prisma o de madera puede ser uno de los mejores regalos que puedas dar, tanto a nivel material como simbólico.
Regalarles momentos de intimidad
¿Cuántas veces miraste a tus abuelos y te sorprendiste de la cantidad de años que lleva esa pareja, sosteniendo todavía el mismo amor que tenían hace 10, 20, 30, 50 años en algunos casos? ¿Cuántas veces, al verlos mirarse, pensaste que ojalá tu relación de pareja pueda ser como la de ellos algún día? ¿Cuántas veces admiraste ese nivel sincero de amor, que inspira a los demás y nos hace creer en un mundo más puro?
Para festejar estas maravillosas parejas de antaño, una buena opción puede ser regalarles momentos a solas, momentos para recordar el amor, la pasión, los años de dedicatorias, charlas, cenas y fiestas compartidas. Entender a los abuelos en el marco de sus parejas es también humanizarlos, es dar cuenta de que cabe muchísimo amor en sus corazones, tanto como para compartir entre sus hijos, sus nietos y su pareja. Por eso, si lo que querés es demostrar a tus abuelos tu admiración por esto, un buen regalo puede ser una frapera o una hielera, para que puedan disfrutar de mágicos mometos que les recuerden sus primeras citas, sus primeras salidas y, quizás, sus primeras anécdotas juntos.
No importa lo que sea que vayas a regalarle a tus abuelos. Lo importante, es el lugar desde el cuál lo hagas. Así como hacen todo ellos, lo que sea que se les brinde para el cumpleaños debe ser hecho desde un lugar de mucho amor, de confianza, de cercanía. Y es que nada puede conmover más a un abuelo que sus nietos interesados en hacerlo feliz, en reconocer sus gustos y necesidades, en querer hacer algo por ellos, cuando ellos siempre lo hacen todo. Celebrar a un abuelo en el día de su cumpleaños es un gran acto de amor.
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